dissabte, 26 de març del 2011

El Menorca, un enfermo en fase terminal

A principios de temporada, a punto de iniciar mi camino jubilar, aconsejé a Jordi Calleja, mi jefe inmediato superior en IB3TV, la conveniencia de andarse "con tiento a la hora de apostar por el Menorca Bàsquet. La situación económica no es boyante y, en consecuencia, tampoco la deportiva". En base a ello, "quizá sea conveniente –comenté a Calleja– planificar la campaña del Menorca a corto y no a largo plazo, para así evitar quedar con el culo al aire". 

EL MENORCA BÀSQUET está sentenciado y, si hagó público este comentario es sólo para evitar que puedan acusarme de oportunista. Quien quiso verlo, hace ya muchos meses, pudo darse cuenta de la delicada situación del equipo menorquín.

ANTES DE SEGUIR quiero reiterar, una vez más, mi convencimiento de lo bien que se trabaja en Menorca en el campo del baloncesto y lo mucho que entiende de este deporte la gente de Menorca Bàsquet. Quiero dejar claro, en definitiva, el buen trabajo que se ha hecho en los últimos quince años.

DICHO ESTO, también soy un convencido de que el Menorca Bàsquet es un enfermo terminal al que Jaume Matas enchufó a la máquina que ayudó a mantenerlo con respiración artificial durante las primeras cuatro temporadas en ACB. Las razones son varias, pero todas desembocan en una: la parte económica. La primera la crisis, y la segunda el bajo techo económico –guste o no guste– de la isla de Menorca para mantener un equipo de ACB. De aquí que la primera etapa en la máxima categoría le costara al contribuyente balear, sólo en aportaciones del Govern, y sin contar las ayudas del Consell de Menorca ni del Ayuntamiento de Maó, la friolera de casi dos mil millones de pesetas. Una auténtica barbaridad. Como una barbaridad es lo que le cuesta a IB3TV el Real Mallorca. Pero esto es harina de otro costal... 

UNA BARBARIDAD, la del Menorca, a la que los actuales responsables de Govern Balear quisieron poner veto limitando la ayuda de esta campaña a quinientos cincuenta mil euros. Si a ello le añadimos que la aportación de los patrocinadores también ha sido mínima, quizá ya sea suficiente para entender el porqué de la actual situación de la entidad, cuyos jugadores, si cobraron el pasado mes fue porque el presidente, Benito Reynés, se rascó el bolsillo, peró se les ha comunicado que éste no cobrarán... 

EL MENORCA, en pocas palabras, está en quiebra. Así, sin más. Debe más (bastante más) del que tiene. Sólo a jugadores antiguos se les adeuda más de un millón de euros. Está en el aire la prima de ascenso. El Tribunal Superior de Justicia ha fallado a favor de antiguo director general, y tienen diez días para abonar 300.000 euros o Sunil puede embargarles. En cuanto a capital social, necesitan cubrir dos millones y medio de euros y no hay forma de pasar de los 100.000. En definitiva, lo dicho, el Menorca es un enfermo en fase terminal.

2 comentaris:

  1. Excel·lent disertació, mestre Tomeu

    ResponElimina
  2. Vacaciones espectaculares pasamos en unos Hoteles en Menorca. Se los recomiendo a todos. Nos recibieron y trataron con el mejor servicio. ¡Saludos!

    ResponElimina